martes, 4 de noviembre de 2008

El holocasuto de hoy (5)

En la actualidad, no ofrecemos holocaustos a Dios trayendo un cordero, un becerro o dos palomas. Todo esto, era un simbolismo de Jesús, el verdadero "cordero de Dios que quita el pecado del mundo", pero sin duda, los principios presentados en este tipo de sacrificio, siguen vigentes hasta nuestros días.

El apóstol Pablo dice: "Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta."

Según lo expresado, hoy en día continuando presentando "sacrificios" a Dios. Ya no son animales lo que ofrecemos, sino que nos presentamos a nosotros mismos ante él. Nuestros cuerpos y nuestras facultades intelectuales, deben ofrecerse al servicio y todo nuestro ser debe estar santificado.
Dios quiere que no nos conformemos a este siglo, desea transformarnos, somos llamados a ser distintos. Esto, sólo puede lograrse por una entrega completa a Dios, así como se hacía con el holocausto bíblico.



Te extiendo la invitación a que tu cuerpo, tu mente, tus capacidades, tu vida entera sea entregada completamente en las manos del Señor. Esta es una decisión de la cual nunca te arrepentirás.